El valor añadido
No podríamos entender una escena audiovisual si sólo viéramos las imágenes. El valor añadido es el valor expresivo e informativo con el que un sonido enriquece una imagen dada, haciendo creer que, en realidad, esta información se desprende de modo natural de lo que se ve y que está contenida en dicha imagen. Se trata de un fenómeno que funciona, sobre todo en el marco de la sincronización sonido/imagen, que permite establecer una relación necesaria entre algo que se ve y algo que se oye.
- En primer lugar, debemos hablar del valor añadido por el texto, puesto que el sonido en el cine favorece a la voz humana, es decir a la expresión verbal, y la destaca de entre los demás sonidos. En la toma de sonido, la voz se aísla en una pista independiente, de los demás ruidos y músicas que serían el acompañamiento. El texto estructura sin duda la forma en que vemos la imagen, puesto que la visión de la imagen cinematográfica es rápida y pasajera, su ritmo viene nos impuesto desde fuera.
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- También debemos hablar del valor añadido por la música,. Así, la música participa en la emoción de la escena, adaptando el ritmo, el tempo y el tono en función de unos códigos culturales de la tristeza, de la alegría, de la emoción y del movimiento: es una música empática. Otras veces en cambio, la música lleva contradice o es independiente al contenido de la escena de una forma anempática.